RESUMEN
LA RELIGIÓN UNIVERSAL (PARTES I y II)
La historia de las religiones nos nuestra cómo el hombre en su acto más íntimo y personal, en su Sí Dios, a Aquel que le sale al encuentro y le pide una respuesta en la que está implicado todo su ser y toda su personalidad. Este acto del cual el hombre debe ser plenamente dueño y libre sin que interfiera en él ninguna persona o institución externa, ha sido con mucha frecuencia condicionado y oprimido por los intermediarios sacralizados (poder, sacerdotes…) que adquieren cada vez más importancia y terminan siendo no mediadores, sino los creadores de una teología y de una moral que define las relaciones de los hombres con Dios convirtiendo la religión en una institución o iglesia en la que ellos adquieren prestigio y poder no sólo en el orden religioso, sino en el político, social y económico oprimiendo a aquellos que de verdad buscan a Dios.
JESÚS DE NAZARET (PARTE III)
El Dios de Jesús es el Dios que todos los pueblos han buscado, es la religión universal recogida y ofrecida a todos los hombres en Jesús de Nazaret. Él no intentó fundar una nueva religión, aunque el resultado haya sido otro. Jesús sólo pretendía acoger aquella búsqueda incesante y universal de Dios acaecida desde los comienzos de la humanidad , cristalizada en el judaísmo de su época y, limpiándola de sus impurezas, enriquecerla desde su profunda e íntima experiencia de Dios para ofrecerla a sus hermanos, los judíos, y, a través de ellos, a toda la humanidad. Una religión universal potenciada y enriquecida por Jesús de Nazaret, que quería devolver al hombre la libertad ante Dios que le habían quitado los intermediarios religiosos (poder, sacerdotes., institució…)
Jesús de Nazaret, como hombre plenamente libre, ha venido a devolvernos la libertad ante todo tipo de opresión mediante la predicación y el establecimiento del Reino de Dios que es liberación de la opresión centrada en el comportamiento y el amor a Dios y al prójimo
LA COMUNICACIÓN DE JESÚS Y SU MENSAJE (PARTE IV)
Nos muestra cómo a partir de la fe en Jesús resucitado, pasando por las sucesivas etapas de la historia de los seguidores de Jesús El mensaje de Jesús se convierte, influida por la personalidad de los propagadores de la Buena Nueva, sobre todo Pablo de Tarso. y por el ambiente cultural en el que viven y al que se dirigen en una teología sobre la que después nacerá y se desarrollará la Iglesia Imperial y posterior hasta nuestros días.
LA IGLESIA (PARTES V - VI)
Sin embargo la historia de la Iglesia, convertida en institución que pretendía continuar el movimiento de liberación iniciado por Jesús, ha vuelto a reproducir en sí misma, y con una mayor exacerbación, la opresión que Jesús quiso romper con su vida y su palabra. Por esto podemos decir que nos encontramos otra vez ante una nueva necesidad de liberación y de redescubrir lo que realmente quiso y quiere Jesús de nosotros.
El Imperio había conquistado a la Iglesia haciéndola a su imagen y semejanza copiando el lujo y esplendor externo de los templos mismo culto paganos.
Jesús predicó con su vida y sus palabras la liberación del hombre oprimido por el poder, los ricos, la ley el templo, la norma y el rito. La iglesia, que se proclama así misma la seguidora de Jesús, con su afán de poder, con su violencia, sus riquezas, la opresión mental y de conducta en, llega a superar con creces todo tipo de opresión, temporal y religiosa y se ha convertido en la mayor opresora del hombre de la historia,
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LA VERDAD NOS HARÁ LIBRES (PARTE VII)
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